martes, 24 de febrero de 2009

Una propuesta para leer

Me gusta cada día hojear "La contra" de la Vanguardia. Es una fuente de inspiración y de recogida de propuestas para el debate en la clase de Religión. ¡Es una mina de recursos didácticos!
Todavía recuerdo algunos artículos que me han impactado y que habitualmente debato con mis alumnos con la intención de mostrales que no existe sólo una verdad, la que nos venden los medios de comunicación, sino que también hay personas, de las que debemos conocer su historia, y que quizás van contracorriente, y eso, hoy día, significa en muchas ocasiones ser crítico o incluso ser cristiano.
Uno de los apartados que siempre leo, aunque tenga prisa, es de la pregunta sobre Dios. Como un "voyeur" los lectores que leemos la respuesta a esta pregunta nos inmiscuimos en una de la facetas más íntimas de la vidad de los demás: la de las creencias. De todas formas muchas respuestas, en uno u en otro sentido, muestran una gran profundidad de pensamiento ante este hecho, por lo que sólo podemos mostrar respeto al proceso personal de cada uno. Es curioso que casi nadie ignora la pregunta. Todos opinan, porque sobre Dios hay algún sentimiento, a favor o en contra. Casi nadie es indiferente. Me sorprende que hay muchas más respuestas a favor de la creencia en el sobrenatural que lo que pensaba, y eso en una sociedad tan aséptica teologicamente como la nuestra me hace también sentirme acompañado.
La última "contra" que he leído, la del filósofo Clément Rosset, ante la pregunta sobre Dios responde: "Es demasiado temprano para hablar de ello", me ha parecido sencillamente genial. No porque la comparta ni la deje de compartir, sino porque plasma perfectamente su pensamiento de vida, eso sí, siempre abierto a la Esperanza.

lunes, 16 de febrero de 2009

A propósito de la historia de un monje budista

Érase una vez un monje budista que vino de visita a una de nuestras flamantes ciudades. No importa ahora el nombre de la ciudad, sólo que se trataba de una urbe occidental, de esas que llamamos "desarrolladas".
El monje se quedó bastante impresionado: Las calles estaban perfectamente urbanizadas; los coches de lujo circulaban constantemente por ellas; había tiendas con todo tipo de luces de colores, músicas en su interior y pantallas de televisión (de plasma por supuesto) que anunciaban todo tipo de objetos; Las personas, lujosamente vestidas y complementadas, caminaban con todo tipo de artefactos encima: gafas de sol, maletas y bolsos de todos los tipos, móviles por los que hablaban continuamente, o incluso caminaban abstraidos en su MP3, MP4 o iPod. Eso sí, nadie hablaba con nadie. Todo el mundo circulaba ignorando a todos los de su alrededor.
El monje, como ya hemos dicho, quedó impresionado con lo que veía, francamente impresionado, y a la pregunta de qué le había parecido su visita a la ciudad, la respuesta fue:
"Todo lo que he visto me ha parecido increíble. Ni me hubiera imaginado poder vivir así. Yo vengo de un país en el que no hay nada de esto y os puedo decir que por un lado sois muy ricos: no os falta nada materialmente hablando, pero por otro lado, os falta lo principal del ser humano, lo principal para vivir como hombres en plenitud: la riqueza espiritual. Sin ella el hombre está muerto".
Esta historia, que es real, os la he explicado por una experiencia que he tenido en clase. Me he acordado de ella porque hoy he explicado a mis alumnos, dentro del tema del budismo, cómo es la austeridad en la que viven los monjes de esta confesión. Creo que algunos alumnos han salido bastante impresionados, pero no impresionados de lo que imaginais, sino impresionados por considerar que pudiera haber alguien "tan colgado como para renunciar a la riqueza material".
A mi, lo que me ha preocupado es que algunos de esos alumnos, que han vivido en el rechazo frontal a la religión en sus casas y en sus ambientes, no tengan ya sensibilidad espiritual. Podríamos decir que espiritualmente están en coma: "encefalograma espiritual plano". Y os puedo asegurar que a pesar de todas sus riquezas materiales, a muchos de ellos no les veo muy felices.

lunes, 9 de febrero de 2009

Rituales laicos

Comienza otra vez un periodo de pre-campaña; luego vendrá la campaña electoral, las elecciones (en este caso vascas y gallegas), y finalmente los domingos de entre campañas (tiempo ordinario). Los creyentes de cada partido, se reunen cada domingo en un recinto cerrado, donde el responsable de turno les hace un sermón desde un atril (igual que en misa), como un presbítero cualquiera. Es el gran problema del laicismo actual: No saber superar las formas la liturgia de la Iglesia: Lo han intentado pero no pueden. Su formación es así y echan de menos las formas. Cada domingo el representante de cada partido nos sermonea y nos adoctrina desde su colorido púlpito. El éxito está asegurado por la retrasmisión del contenido se su doctrina en los medios de comunicación. Ya hay a quien a estos predicadores de los domingos (días escasos de otras noticias), les llaman "los curas", y a la salida, los más allegados, espetan el socorrido"hoy ha hablado usted muy bien". Vamos, que aunque quieran, nada cambia. No saben cómo hacerlo.

sábado, 7 de febrero de 2009

El calendario escolar

Hay personas que con ese laicismo mal entendido, del que ya hemos ido explicando cosas anteriormente, les irrita profundamente hacer vacaciones de Semana Santa. Son unas fiestas religiosas variables cuyo origen está en el calendario lunar judío, y ya se sabe, la luna funciona diferente al sol. O sea, que además de que la Semana Santa cae siempre en fechas distintintas, según sea la fecha de la primera luna de la primavera, es la fiesta más importante de judíos y cristianos y eso suena a mucha, demasiada religión.
La propuesta que acaba de hacer el Conseller d'Educació de la Generalitat de Catalunya Ernest Maragall de comenzar las clase una semana antes para luego dar esa semana de vacaciones en el mes de febrero, parece que ha sido aplaudida por algunos sectores de la sociedad que han creído ver la forma de suprimir las vacaciones de Semana Santa y colocar unas vacaciones en función del cálculo matemático de lo que dura el curso y dividirlo por tres. Así tendríamos las vacaciones de... ¿Primavera? ¿Del segundo tercio del curso? ¿Del mes de febrero? ¿Del despertar de la vida? ¿Llegaremos a la asepsia japonesa de las fiestas del no saber qué celebrar?

Señores, definitivamente estamos perdiendo el sentido común. Pedagógicamente las vacaciones de febrero son una aberración. Por un lado es el momento que mejor se está en clase, si funciona la calefacción claro, y por otro es cuando los alumnos cogen mejor el ritmo de estudio. La implantación de esa semana "tonta" en el mes de febrero, tiene su origen en la famosa "semana blanca" que se impuso en algunos centros y se fue extendiendo como la semana sin actividades en el centro por causa de los que marchaba. La Semana blanca ha fracasado, porque al final fue la excusa para incluso ni ir a la nieve ni a clase. Lo peor de todo fue la semana de después donde los alumnos no funcionaban y tardaban dos o tres semans en coger de nuevo el ritmo de trabajo. Otros, lo intentaron con el carnaval, pero allá donde no hay una tradición carnavalesca consolidada, tampoco funciona. Así que la propuesta no tiene ningún sentido, ni pedagógico, ni festivo, ni de nada. Por lo tanto, ¿qué celebramos? ¿La fiesta de febrero o la Semana Santa? ¿Las dos, o ninguna?.
¿Y Qué tal si para racionalizar todas las fiestas y seguir con la tontería implantamos el día de la Fiesta Mayor? Yo propongo que todos los pueblos y ciudades la celebren el 25 de Julio. Es sólo por unificar...

lunes, 2 de febrero de 2009

Publicidad sobre Dios (II)

Dicen la malas lenguas que los Obispos están encantados con la publicidad de Dios en los autobuses. Si os digo la verdad, yo pensaba que la polémica no iba a durar mucho, pero alguien ha ido atizando el fuego para que se siga hablando. Los Obispos, como he comentado, están encantados porque se habla y se habla de Dios. Recuerdo una frase, no sé quién la pronunció, pero decía algo así: "No me importa que hablen mal de mi, porque lo importante es que hablen". Y es que cuando se habla de algo o de alguien, inmediatamente ese algo o alguien se convierte en importante.
Dentro de la controversia del autobús quisiera hacer una mención especial para un programa de televisión: "Salvados" de la Sexta, que, con humor muy fino, ha entrado en la disputa de la publicidad en los "autobuses de Dios" aportando un tercer lema a toda esta campaña: "Autobús agnóstico. Aquí pagan justos y pecadores". ¡Simplemente genial!
Por cierto, hoy es la Candelera y en Cataluña hay una frase que dice "Si la Candelera plora l'hiver és fora però si riu l'hivern és viu". Así si hacemos caso de la tradición, ya habríamos pasado lo peor del invierno. A ver si la Candelera acierta....